Aunque en la pantalla grande Sylvester Stallone es famoso por pelear hasta las últimas consecuencias, en la realidad el actor demostró ser una persona que tiene la humildad suficiente para darse cuenta cuándo es necesario ceder para mantener la paz en el vecindario. Esto se hizo evidente recientemente cuando retiró una propuesta presentada ante el Ayuntamiento de Palm Beach para construir una barrera marítima frente a su propiedad. La obra había generado conflicto con sus vecinos.
Según informó Bloomberg, Stallone finalmente renunció a la idea de colocar una barrera destinada a bloquear el paso de navegantes y mantener las algas marinas alejadas de la playa privada de su mansión de 35 millones de dólares en Florida. El actor había presentado este proyecto al ayuntamiento con el objetivo de proteger su hogar de embarcaciones “abandonadas” que vierten “aguas residuales, gasolina, basura y heces de perro” en el agua.
Sin embargo, ante las objeciones de los vecinos, quienes consideraban que Stallone intentaba extender sus derechos de propiedad sobre el agua, el actor decidió retirar la propuesta antes de que el concejo municipal tomara una decisión.
Originalmente, Stallone necesitaba el permiso de la alcaldía para montar una barrera flotante de 58 metros en forma de L, de 45 centímetros de alto, que se elevaría aproximadamente 20 centímetros sobre el agua y se extendería 25 centímetros por debajo de la superficie. Esta estructura se anclaría al fondo de la vía fluvial mediante un sistema de cuerdas de nailon y ojales, según consignó The Palm Beach Post.
Al presentar la propuesta, según el medio local, Stallone argumentaba que la barrera permitiría que la fauna marina nadara por debajo y alrededor de ella. No obstante, según indicó Bloomberg, los miembros del concejo y los residentes entendieron que era inapropiada, ya que infringía el derecho a las vías fluviales públicas. Ante estas críticas, el protagonista de la saga de Rocky retiró la propuesta.
Palm Beach es una comunidad sumamente exclusiva que impone regulaciones estrictas para el desarrollo de infraestructura nueva, y no importa si debe ponerle límites a sus habitantes más poderosos. De hecho, Bloomberg recordó cuando el presidente electo Donald Trump también tuvo enfrentamientos con la alcaldía durante años por su propiedad de Mar-a-Lago, una disputa que incluyó un intento fallido de subdividir el terreno en la década de 1990 y un esfuerzo posterior para transformar la residencia en un club.
“Es increíble para mí que puedas tener tu casa, tus pertenencias, tu bote, el lugar que es tu santuario, y que una persona esté sentada allí durante 10 meses lavando su ropa y no haya nada que puedas hacer al respecto”, dijo Stallone a las autoridades, en declaraciones reproducidas por los medios locales.
Ante la queja, los vecinos argumentaron que una celebridad como Stallone debería esperar cierta falta de privacidad al comprar un terreno junto a una vía fluvial pública. “El propietario tiene la responsabilidad de encontrar una manera de mitigar su exposición”, dijo Jane Lindsay Scott, residente de toda la vida de Palm Beach. “Pero la vía fluvial debe permanecer abierta”, concluyó.
Esa postura fue la mayoritaria entre los miembros del concejo y otros residentes, por lo que Stallone retiró la propuesta sin prolongar, por esta vez, la pelea un round más.