N. estaba merendando con unos amigos en una cafetería cuando el teléfono le empezó a explotar de notificaciones. Como un experimento, había programado un pequeño proyecto, un robot que fuera contando cada vez que el presidente Javier Milei le daba like a un posteo en la plataforma X, aún conocida como Twitter, su red social favorita y la que más consume. Le generaba curiosidad responder dos preguntas iniciales: cuánto tiempo pasaba ahí el mandatario y qué cosas ‘le gustaban’. Por cómo se volvió viral, se dio cuenta de que no era el único interesado en las respuestas a esos enigmas.
«¿Cuántos tuits likeó nuestro Presidente?», desarrollada por N., es una web que monitorea en tiempo real la actividad del mandatario en la cuenta @JMilei. Allí no hay community manager, especialistas en comunicación política ni nada similar: en varias entrevistas el jefe de Estado confirmó que a su cuenta de Twitter no la maneja nadie salvo él, una manera de mantener diálogo directo con su audiencia sin depender de intermediarios.
Según los datos que recoge, en la última semana promedió unas 2 horas y 51 minutos al día en la red social. Por día hace un centenar de RT (retuits) y les da like a más de 200 mensajes.
En medio de las reformas que el mileísmo intenta llevar adelante, lo que hace el Presidente en su cuenta de Twitter podría ser un tema menor salvo por el fuertísimo tenor de los posteos que comparte y, sobre todo, a los que les da «Me Gusta». Desde allí se subió a una fuerte pelea contra Lali Espósito, trató de traidores a los diputados que bocharon la Ley Ómnibus, apuntó contra los gobernadores y le dio like a una publicación en la que el gobernador chubutense, Ignacio Torres, aparecía caracterizado con rasgos del síndrome de Down.
Los likes y rts de Milei en X.«Es una idea que flotaba en mi cabeza, se la comenté a una amiga y me dijo que era un ‘Re sí’», cuenta N. a Clarín. Tiene 18 años y recién terminó la secundaria, pero es programador desde hace mucho tiempo. «Tuve la suerte y el problema de estar pegado a la PC desde chico», cuenta N.
Prefiere, eso sí, no brindar su nombre real para hacer la entrevista. Es moneda corriente el ataque desde distintas cuentas satélite de Twitter (algunas de ellas que operan desde el Salón de las Mujeres de Casa Rosada) a quienes disienten con el Presidente, como lo experimentaron Lali o el propio Torres en las últimas semanas. En Twitter su cuenta es @esoesnulo.
El desarrollo del bot, en lenguaje JavaScript y de código abierto en GitHub, le llevó apenas un fin de semana. Lo arrancó un viernes y para el sábado ya tenía la maqueta. Lo puso en marcha el 10 de febrero.
«La idea del bot nace de que ya se estaba hablando mucho sobre el uso de Twitter del Presidente. Que sin medirlo parecía alto y las interacciones que tenía eran fuertes. El bot funciona scrapeando la página con cuentas aleatorias», explica. Este análisis se hace cada uno o cinco minutos y va generando nuevos ingresos cada vez que aparece un like en la cuenta de Milei.
Los reposteos de Javier Milei cuando se peleaba con Lali Espósito.Como Twitter no brinda información precisa de a qué hora Milei hace los likes, el robot revisa constantemente para ver si aparecen nuevos tuits que al Presidente le gustan. Con ello va armando los gráficos, en los que se pueden ver los picos de actividad, que se suelen repetir día a día. Usualmente están después de la madrugada, como el pasado martes, donde compartió 31 entre las 1 y las 2 de la mañana. A las 8 ya estaba nuevamente conectado a su cuenta.
El algoritmo que N. armó trata de calcular las sesiones. Es decir, las veces que Milei agarra su celular para chequear su red social predilecta. Cada sesión se mide en minutos, no por cantidad de «Me gusta».
«Junta grupos de likes de hasta 3 minutos entre sí. 15 likes en 3 minutos son 3 minutos, no digo que es un minuto por like. Como al entrar a Twitter tardás un toque para leer antes de arrancar a favear, lo mismo que al cerrar, le sumo un minuto al comienzo y otro al final para estimar las sesiones», enfatiza el autor. Para N., dejar en claro este punto es fundamental.
Esa sumatoria es la que termina arrojando el tiempo que le dedica Milei a scrollear tuits que le interesan.
Los hallazgos del robot que monitorea a Milei: por qué el tuit discriminatorio fue real y el like a una actriz porno, no
El robot comenzó a trabajar hace menos de tres semanas y se volvió un tema viral casi a la par de la pelea con Lali Espósito. Desde entonces, distintos medios comenzaron a nutrirse de la información que iba arrojando la herramienta y se volvió un tema de conversación en redes sociales.
Esto le valió algún que otro cruce por parte de tuiteros alineados con el gobierno. Varias cuentas de las favoritas de Milei tuitearon sobre el sitio. «Estos tipos como no le encontraron NADA MALO a Milei, le pagan a un tipo para que se ponga a contar los likes que dio Milei en Twitter. Claramente NO LA VEN», escribió @TommyShelby_30, el segundo usuario más faveado por el mandatario.
Estos tipos como no le encontraron NADA MALO a Milei, le pagan a un tipo para que se ponga a contar los likes que dio Milei en Twitter.
Claramente NO LA VEN. pic.twitter.com/6w2IomJ2nb
— Milei SheIby (@TommyShelby_30) February 17, 2024 La más faveada es la influencer y arquitecta Ornella Panizza, conocida como @Ladymarketok. «A Milei le miden el tiempo de Twitter, para esto hacen notas, eso sí, de la trata en Chaco cri cri. Lo importante siempre del país», chicaneó.
El bot que desarrolló N. también va generando una base de datos sobre los posteos a los que les da like el Presidente. Fue esa herramienta la que le permitió confirmar que a Milei efectivamente le gustó un posteo discriminatorio de la cuenta @LiberalDeMilei, que buscaba burlarse del mandatario patagónico al retratarlo en una imagen con los rasgos de una persona con síndrome de Down.
Es que el miércoles su vocero, Manuel Adorni, negó que haya existido el like. «Lamentamos todo lo que ocurrió y por supuesto no fue partícipe de semejante aberración», dijo Adorni en su habitual conferencia de prensa cuando le preguntaron por esa publicación. «Eso entiendo que no ocurrió y nos sentimos tan dolidos, porque me dediqué a analizar un poco la cosa, esa publicación desapareció después», dijo el vocero.
El «me gusta» de Javier Milei a un posteo discriminatorio en las redes sociales contra el gobernador de Chubut, Ignacio Torres.Según confirma N., el registro del Like sí aparece en su base de datos. La cuenta de donde salió, por otro lado, pasó a estar privada primero y cambió el nombre después; por esos cambios, el tuit de la polémica ya no aparece en la lista de los «Me Gusta» del Presidente.
Con esa misma información, por otro lado, esta semana salió a desmentir la versión falsa de que Milei les había dado like a algunos posteos sobre actrices porno, como Mia Khalifa.
Para N., la información que arroja el Bot puede servir para generar más datos a mediano plazo sobre un tema que, considera, es relevante. «Todavía se puede hacer más análisis de los datos del Twitter, cuáles son las más likeadas, y si además son parte del equipo que ahora fue contratado», señala sobre el staff de comunicación digital que desde la semana pasada lidera Juan Pablo Carreira, más conocido en X como Juan Doe.
Si bien aclara que «es programador y no analista político», N. dice que le impactó el tiempo que pasa Milei en redes.
«Más allá de eso, creo que lo más fuerte es el llamado algoritmo de Yrigoyen. Es claro por la cantidad de tiempo que pasa en redes, sumado a que tiene una percepción del mundo muy economicista que no registra tanto lo social. Y eso se ve en su Twitter», evalúa sobre el consumo mediático presidencial.
«Mucha gente que pasa demasiado en redes tiene miradas atravesadas por eso, pero lo novedoso de este caso es que se trata de un presidente», cierra N., el joven que creó el único sistema que puede seguirle el frenético pulso tuitero a Milei: un robot.