La Comisión Antimonopolio de la Unión Europea ha decidido imponer una multa record de 1.800 millones de euros a Apple por violaciones de las normas de competencia con los servicios de música en streaming.
El Poder Ejecutivo lo anuncia en una nota y especifica que la decisión se basa en «condiciones comerciales desleales» practicadas por el grupo.
Según lo que surgió de la investigación -explica-, Apple impide que los desarrolladores de aplicaciones de streaming de música puedan informar a los usuarios de iPhone y iPad sobre servicios de streaming de música alternativos y más baratos.
La investigación comenzó a raíz de una denuncia de Spotify. La cantidad es claramente superior a los rumores de la prensa que hablaban de una multa de 500 millones.
La decisión antimonopolio «se tomó a pesar de que la Comisión no logró descubrir pruebas creíbles de daño al consumidor e ignora la realidad de un mercado próspero, competitivo y de rápido crecimiento«, se defendió Apple en una nota.
«Abuso de posición dominante» y la guerra con Spotify
Según Apple, Spotify es la principal beneficiada con esta medida. Foto AFP«El principal partidario de esta decisión, y el mayor beneficiario, es Spotify, una empresa con sede en Estocolmo, Suecia. Spotify tiene la aplicación de música en streaming más grande del mundo y se ha reunido con la Comisión Europea más de 65 veces durante esta investigación», completó el mensaje de la empresa tecnológica.
«Durante décadas, Apple abusó de su posición dominante en el mercado de música en streaming a través de su App Store«, ha advertido la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario responsable de Competencia, Margrethe Vestager, en una rueda de prensa para anunciar la sanción.
La política danesa sostuvo que impedir a los desarrolladores que informaran a los consumidores sobre ofertas «alternativos y más baratas disponibles fuera del ecosistema de Apple» no solo es «ilegal» sino que tuvo un impacto en «millones de consumidores europeos» que no pudieron «elegir libremente» qué servicios contratar.
El caso se remonta a 2022, cuando Bruselas acusó a la compañía de actuar como «guardián» del acceso a las aplicaciones y abusar de una posición dominante en el mercado de la distribución de música en streaming. A partir del 7 de marzo, Apple y otras grandes empresas tecnológicas también deberán cumplir con la nueva normativa de la UE, la Ley de Mercados Digitales, para abrir sus servicios.
Apple dijo en enero pasado que cambiaría sus condiciones de facturación y permitiría tiendas de aplicaciones alternativas en sus dispositivos por primera vez. Spotify y otros han criticado los cambios por considerarlos carentes de sentido.
La compañía argumentó que cambiar sus términos y condiciones solo consolidaría a Spotify como el servicio de transmisión de música dominante.
Apple, una de las empresas más valiosas del mundo, también se ha ofrecido a liquidar los cargos por su tecnología de pago para dispositivos.
Por otra parte, está esperando un fallo judicial final sobre su disputa sobre ayudas estatales fiscales con la Comisión, que dictaminó en 2018 que los acuerdos fiscales de la empresa con Irlanda eran ilegales. Un tribunal inferior anuló la decisión de la UE en 2020.